1 de febrero de 2017

La gran casa blanca y rural...

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Bienvenidas de nuevo al miércoles vergeliano. No sé que me pasa chicas, pero cada semana me supero más y más en haceros llegar casas que nos roben el corazón. Y siempre al acabar de describirlas con montones de fotos, me digo a mi misma...¡Está de hoy es la casa de mis sueños, la que me construiría mañana mismo sin pensármelo dos veces!. Pues bien preciosas, la de hoy es así, una gran casa que posee el don de tenerlo todo, una fachada blanca imponente nada más avistarla en lo alto de la colina, rodeada de un verde que se puebla de variadas especies en cada una de las estaciones y hoy tenemos la suerte de pasearnos por ella cuando acaba de florecer la olorosa lavanda que se nos abre por todo el sendero...

Subamos las blancas escaleras que nos conducen hasta el porche, que maravilloso recibimiento, preludio de que al entrar por esa puerta nos vamos a quedar totalmente enamoradas de todos sus interiores...

Que no os tienten las hamacas colocadas en el mismo jardín, ya sé que os gustaría relajaros admirando semejantes exteriores...
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Pero ya tendremos tiempo de ello, ahora me muero por colarme dentro y saborear cuanto se abra ante mis ojos...
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Luz y más luz, claridad a raudales, ventanas infinitas...
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La cocina de esta gran casa es mágica...
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Posee ella la mezcla del blanco en sus muebles y paredes para después rodearse de complementos en esos tonos azulones que tanta belleza aportan...
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Ohhhhhhhhhh chicas, que digo azules, también veo verde menta, un color que me apasiona. Como me gustan esas cestas, esa balanza antigua, esas manoplas tejidas a crochet, esos bulbos sumergidos en tarros de cristal...
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Y esa perfecta mesa delante del ventanal sobre la que asoma una sopera repleta de variedades de temporada...
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Nuevamente reaparece ante mi ese maravilloso banco de estilo sueco repleto de cojines, mejor no podría quedar en ese escogido rincón junto a la gran alacena luciendo vajilla y recibiendo toda la luz deseada...
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¿Quién de nosotras se resiste a cocinar en semejante espacio?. Yo me volvería loca horneando bizcochos por el puro placer de no moverme de ahí...
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Con esas grandes vidrieras albergando todo lo necesitado y a la vista...
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Y con todos esos detalles que la hacen tan especial...

Chicas la mesa está vestida, siempre hacemos un alto en cada casa visitada para saborear el momento. La de hoy nos espera con un gran ramo silvestre y hojas esparcidas con total delicadeza...

Me pido sentarme en el banco, bajo esa vela circular encendida y viendo a lo lejos el inmenso jardín...

De la cocina al salón, sin romper el estilo, como una prolongación del espacio que se une a colores y texturas...

Nuevos muebles blancos de marcado corte rural. Hermosa la lámpara que preside el conjunto, hermosas las sillas...

Y hermosos los blancos geranios adornando la consola...

Pero nada comparable a esa alta alacena francesa luciendo, con sus copas talladas, sus botes variados, sus soperas pintadas y sus plantitas en el borde alegrando el conjunto. Fijaros chicas que en esta casa son muchas las plantas que se cuelan por todos lados, es como si el exterior quisiera prolongarse hacia adentro. Nos hemos topado con flores en la cocina, con geranios y bulbos en el salón...

Y hasta con un pequeño olivo decorando el hueco de la escalera. Ni que deciros que me encanta ver tanta variedad verde, no hay nada como decorar con ellas para dar vitalidad a nuestros mimados hogares...

Pero subamos a la planta de arriba donde nada más poner los pies nos recibe un rinconcito encantador. Mesitas varias, unas más altas, otras más bajas, pero decoradas al detalle gracias al cesto repleto de blanca paniculata y faroles que se encienden ante tanta vergeliana...
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Un enorme corazón muy natural preside la gran cama y no hay mucho más que decore esta estancia, tal vez, una escogida ropa de cama, un cabecero de capitoné...

Un gran ramo de acebo...

Unas enormes cestos florales...
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Y un sobrado encanto que estoy segura que al llegar el anochecer invita al descanso...

Nos paramos ante el cuarto de baño chicas. He de confesaros que me ha encantadooooooooo. Yo creo que nunca antes me había topado con un lavabo tan sumamente decorado con encanto. Desde el ventanal que todo lo inunda de luz, pasando por las paredes de finas lamas, siguiendo por semejante bañera, reparando en los infinitos detalles que lo conforman, todo está conseguido para no salir de él, para perderse por horas y aislarse de todo...

Ya me diréis sino es para menos, encendiendo unos portavelas, colocando unas rosadas toallas y dejándose atrapar por el aroma de los bulbos de iris, yo me alargo mi particular spa hasta que me de la gana...

¿No estáis de acuerdo?...

Pero volvamos a salir al exterior, nos quedaron ganas de él y vamos nuevamente a retomarlo...
Cruzamos el maravilloso porche todo vestido de blanco y de verdes variados...
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No le faltan detalles vergelianos que también sabemos reconocer...
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Nos aposentamos en la mesa que asoma al inmenso jardín, el tiempo acompaña y vamos a aprovecharlo...
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Aquí nos quedaríamos eternamente charlando, taza de café en mano ante ese ramo en tonos lilas, sino fuera porque nuestros ojos inquietos han divisado algo maravilloso al final del  jardín...
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Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii vergelinas mías, está casa cuenta con una "orangerie", o como nosotras simplemente llamamos casita de jardinería...

Mirad que cosita más bonita, que ventanas de cuarterones, que puerta en verde inglés tan especial y que interiores se adivinan con tan solo asomarnos...

No nos vamos a quedar con las ganas de poner los pies en ella...

Madre mía, el sueño de cualquiera de nosotras. Un espacio solo nuestro, para las amantes jardineras, con mesa de trabajo, con vidrieras infinitas...

Con regaderas, bandejas, cestos, botellas y montones de macetas...

Me están dando unas ganas de emergerme en variados trasplantes que no creo que me resista...

Así que con el permiso de su encantadora dueña voy a plantarle en nombre de todas nosotras, hermosos pensamientos en lila. Van a quedar geniales junto a las enormes hortensias y a la espigada lavanda que ya ha empezado a florecer...

¿Qué os parece chicas?...

Como me ha gustado esta casa ubicada en plena Noruega, con ese marcado estilo escandinavo, con esos colores salpicando interiores y exteriores, con tantísimas plantas y flores, con una luz infinita y un gusto impecable que te roba los sentidos...
Pues nada chicas, por aquí me quedo otro rato, soñando con cada imagen y llevándome de todas ellas montones de ideas...
¡Feliz miércoles vergeliano!

7 comentarios:

  1. Matilde: una vez más te superas a ti misma. No sé si me gusta más la casa o cómo nos la cuentas. De verdad que nos haces sentarnos en cada hamaca, en cada silla del jardín, en la preciosa cocina nos vemos desayunando y en el baño acicalándonos para ir a dar un paseo por el campo. Qué no daría yo por tener un hogar así! Seguiremos soñando, al menos las que vivimos en pisos y no tenemos jardín...

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  2. Yo me voy a vivir en ella ahora misma es una maravilla.....
    Un beso

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  3. Buen día Matilde y chicas queee decir,de esta preciosa,casa, en Noruega,no hay nada,que diga no me gusta,están delicadamente decorada,que nos invita a soñar,y copiar, algún detalle que nos guste,yo a los miercoles,mirando estas preciosas casas, como dice ximena,y la manera que nos narras,lo llamaría,las vergelianas soñando,por que es asi,entramos en ellas,bueno Matilde, espero que termines de lo mejor este dia,lo mismo a todas las chicas un beso, yo por mi parte,voy a seguir soñando,total no cuesta nada,hasta mañana.

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  4. Buenas tardes Matilde: la casa de Noruega , ¡preciosa!, como todas las que nos presentas.
    Por favor Matilde, te ruegome indiques si te llegan mis notas, es que hace varios meses que no aparecen publicadas e igual este haciendo algo mal.Un saludo cariñoso.

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  5. Sabes Maite? no sé si las fotos o tu maravillosa forma de describirla, pero según iba viendo me iba emocionando o poniéndome nerviosa ante tanta belleza, cuantas cosas y todas de nuestro gusto, que casa, jardin y la casita, no se puede ser tan pasional.Hasta mañana

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  6. Hola Matilde, saludos a las chicas. Wuau ,tienes toda la razón,cada hogar que nos muestras ,decimos "la casa de nuestros sueños "😀😀. Hasta que a la semana siguiente nos muestras otra ,y volvemos a decir lo mismo 😀😀. Una cosa es indudable, que hay gran cantidad de casas ,que nos enamora. Como esta casa y la de la semana anterior,ambas muy acogedoras,con mucho encanto, románticas. Luego,la forma tan hermosa de narrarlas las hace aún más encantadoras y cálidas. Como dicen las amigas, soñar es gratis 😜😜. Muchos besitos para ti y las vergelianas, Dios las bendiga 😙😙

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  7. Qué maravilla de casa... Cuantos detallitos. Estas casas tan blanquitas, me transmiten una paz! Y qué decir de la casita del jardín... Yo, allí montaría mi refugio para hacer mis manualidades. Esta casa no tiene lugar que no sea acogedor!!

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