31 de enero de 2016

Domingo de violas...

 Entre ramas sin hojas de mi árbol de magnolia asoman tonalidades muy lilas de la mano de mis nuevas violas cornutas compradas en el mercado del jueves. Son flores de temporada invernal que nos ayudan a dar colorido a nuestros exteriores. Podría haberlas comprado en multitud de colores variados, pero este año me ha dado por los malvas, creo que es un color que aporta mucha luminosidad a rincones que al llegar estos meses permanecen sin vida...
Dos de ellas están metidas dentro de una caja de fruta pintada por mi  hace ya tiempo...
 Otra de ellas plantada en la jardinera de barro junto a los pompones que forman las flores de agapanto, esos preciosos bulbos que florecen en pleno verano pero que yo he querido perpetuar todo el año gracias a la perfecta imitación de tela que los sustituye...
 Como me gustan las vilolas chicas, su cepellón se llena de pequeñas florecillas que brotan sin parar. Se parecen bastante a los pensamientos por su forma y colorido, pero a diferencia de éstos, las violas aportan mucha más viveza al poblarse continuamente...
 He querido combinar dentro de la caja dos tonos lilosos, uno más oscuro y liso...
 Y otro más clarito y variegado...
 Juntos ambos quedan perfectos encima de la mesita junto a los sofás de ratán...
 La tercera de las violas he querido plantarla en la gran jardinera colocada en el poyete. A su lado la acompañan una pequeña crasa muy verde y pensamientos también en lila...
 Fijaros chicas en la hiedra que recorre la celosía, está adquiriendo matices marronosos por el frío, no será hasta la llegada de la primavera que vuelva a verdear por completo. Por ello nada mejor que acompañarla de vincas coloridas que la alegren...

 Y porqué no de naranjas pensamientos que están por estas fechas mucho más que preciosos...
 Mi vergel se reinventa cada estación. No importa que sea pleno invierno, siempre encontraremos plantas vivaces de temporada que plantar en esas jardineras que se han quedado vacías...
 Ni que decir que estas vincas son facilíismas de cuidar. Pocos riegos, cortar las flores que se vayan marchitando para favorecer más floración y ubicarlas en un lugar soleado...
 Después solo nos queda repartirlas por jardineras, cajas o maceteros dejando que llenen de colorido nuestros vergeles...

 Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii preciosas, se me cuela  a lo lejos otra preciosa y nueva variedad en rosa...
 ¿Adivináis de cual de ellas se trata?...
 Seguro que con lo jardineras que sois todas ya la habréis reconocido...
 Domingo el de hoy carente de solecito, eso si, con cálidas temperaturas que me han permitido realizar tareas jardineras...Podar los rosales, recortar los jazmines, arrancar malas hierbas que siempre brotan, pinzar flores marchitas y revolver la tierra de las jardineras que queda apelmazada...
 Mientras los míos en el interior disfrutando de las últimas horas del fin de semana...
 Eso si, los que mejor lo saborean son esos preciosos peludos siempre colocados en el mejor de los sitios...
 En el  gran sofá, rodeados de cojines, de preciosos bulbos, de tenue luz y siempre atentos a todos y cada uno de nuestros movimientos...
Desde "Un vergel en la ciudad"...
Feliz último domingo de Enero, mañana estrenamos nuevo mes, el más corto de todos y por aquí nos encontraremos para recibirlo como se merece...
¡Hasta mañana preciosasssssssssssssssssssss!

29 de enero de 2016

Mi pequeño ficus benjamina...

 Mis amigas me conocen tanto que son algunas las que de vez en cuando me obsequian con pequeñas plantas para añadir a mi vergel. Hace unos días una encantadora mujer que hace las clases de agua gim conmigo se presentó con este tesoro. Literalmente me dijo..."Fíjate la planta que me crece en el jardín sin parar, tengo tantas que te traigo una de ellas"...¡Ohhhhhhhhhhhhhh!, exclamé yo, un ficus benjamina...Como que se me quedó mirando sorprendida queriendo decir, ¿un qué?...
Si chicas, un ficus benjamina pequeñito pero precioso. Bueno precioso ahora que lo he retocado un poquito. Mi amiga me lo trajo desgarbado, con ramas secas por aquí y por allí, dos troncos pelados y bastante pobre de tierra. Pero yo gran vergeliana de manos verdes lo tomé entre mis manos, le quité hojas secas, lo trasplanté a un nuevo tiesto, lo recorté un poquito, lo regué y lo pulvericé...
 Y lo más inspirador chicas, le uní los dos troncos que tenía con fina cuerda para que así vaya creciendo en forma de pequeño arbolito...
 Miradlo lo coqueto que ha quedado, dentro de un bonito macetero blanco de latón con palabras escritas...
 Ahora se que con tantos mimos aportados, crecerá de forma imparable como solo saben hacerlo los ficus benjamina. Tuve uno hace muchísimos años. Presidía el salón de mi primer apartamento de recién casados. Era enormeeeeeeeeeeeeeee, con tronco retorcido y montones de hojas verdes. Vivió con nosotros muchísimos años hasta que nos mudamos a la actual vivienda, lo saqué a la terraza y acabó secándose por completo. No lloré yo al tirarlo a la basura sin poder recuperarlo. Eran tiempos en que aún no dominaba yo los haceres jardineros y no había mes que no me cargará alguna de mis plantas. Haber si encuentro alguna foto de él  y os lo enseño...
 Pero éste, éste me va a durar muchos años, estoy segura. Lo saco un poquito a la terraza pequeña para que reciba algunos rayitos de sol...
 Son duros ellos, con riegos regulares, pulverizaciones en su hojas,  mucha luminosidad y sin corrientes de aire vivirán sin problemas. Podemos también plantarlos al exterior algo refugiados, pero yo recordando al mío seco de hace años, prefiero mantenerlo en el interior...
 Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, son pocas las veces que os muestro mi mini vergel. Precioso está al igual que el grande. Rodeado se ha quedado el ficus de pensamientos lilas, crasas variadas, pinos, marquesa y ciclámenes en rosa...
 También supone este pequeño exterior un deleite para todos...
 Que podemos admirar desde el mismísimo salón...
 Y mi nuevo ficus ahí presidiendo hoy el conjunto floral. Si lo viera mi amiga, seguro que se sorprendería por lo bonito que ahora luce...


 Vamos a recorrer juntas el balcón anexo a la pequeña terraza...
 Para enseñaros como están floreciendo los pensamientos que planté hace ya meses. Hasta ahora solo asomaban hojas y más hojas, pero ante mi asombro han empezado a brotarle sus primeras flores lilas...
 Que ilusión chicas, la espera merece la pena y ahora solo queda que poco a poco las jardineras se vayan llenando de ellas hasta rebosar...
 Algunas ya están completamente abiertas con una belleza total...
 Y otras solo son por ahora diminutos capullos delicados...
 Además han empezado a despuntar también por la tierra las primeras hojitas de bulbos de tulipán que estaban enterrados y es que este invierno cálido está adelantando el despegue de muchas plantas...
 Tímido solecito el de hoy viernes, eso si, perfecta temperatura que no impide que me paseé por mis vergeles. Ahora ya dentro echo un último vistazo a mi verde ficus antes de volver a colocarlo en la cocina, el sitio escogido para  lucir...
 Preciosas un nuevo fin de semana se nos brinda por delante, dicen que con tiempo casi, casi primaveral. Se me olvidaba deciros que ayer me paseé por el puesto de flores, faltaría más, el único que permanece abierto por este mes. Se vinieron conmigo algunas plantas en flor preciosas que ya os enseñaré y que aportan enorme colorido a la terraza de arriba. Víctor me dice que ya no me caben más, pero yo no puedo resistirme a ellas de ninguna de las maneras...¿Os apetece verlas mañana?...
Por aquí me tendréis chicasssssssssssssssssssssssssssssssssss...
Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, encontré fotos de mi antiguo ficus, aquí las tenéissssssssssssssssssssssssss...
Enormeeeeeeeeeeeeeeeeee estaba y yo con unos cuantos años menos junto a mi princesa, delante estamos sentadas del enorme ventanal de bonitas cristaleras que presidía el salón...
 ¿Creéis que mi nuevo ficus crecerá tanto como éste de retorcido tronco?...
¡Feliz viernes para todassssssssssssssss!

27 de enero de 2016

El ático vergeliano en Asturias de Marta Lladó...

Hoy volvemos a viajar en la distancia, pero más cerquita, al maravilloso paraíso de Asturias. Vamos juntas a asomarnos al ático que nuestra querida Marta Lladó a adquirido para pasar en él unas eternas vacaciones. Va y viene, pero yo sé que le gustaría permanecer en él eternamente. No me extraña...tengo el privilegio de conocer semejantes tierras porque fue esta mujer con sus fotos y explicaciones la que en esta casa nos fue impregnando de la belleza de esa tierra y he de deciros que ya somos enamorados incondicionales de ella. Alarguemos la vista al piso más alto de un edificio típico asturiano, las cortinas corridas de par en par para saborear el verde que todo lo inunda. Si algo le sobra a este piso es luz colándose por altos ventanales de pura madera...
Que me decís chicas si veis esta foto...
Y después esta otra...Alguien muy especial ha metido la mano de lleno para transformar un mismo espacio. Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii con lo que nos gustan a nosotras los antes y después. Semejante cambio es para volverse loca de amor. Marta, confieso que desde que vi tu nuevo salón transformado me tiré horas admirando todos y cada uno de los detalles. Como puede una estancia cambiar de tal forma. Si ya lo se, tienes la llave de la inspiración, de la naturalidad y de la total elegancia...
Todas sabemos lo difícil que es coger una vivienda de alquiler tal cual nos la entregan y no poderla transformar. Pero Marta se mudó a ella, hizo pasar tiempo y después habló con sus dueños que le dieron carta blanca para muchos pequeños cambios. ¿Quien se niega a ello ante una entrañable mujer como ella?...
Y se puso manos a la obra. Se centro en su salón, ese espacio tan vivido. Lo inundó de blancos...blancas las paredes, blancas las largas cortinas ondeantes de Ikea, blanca la afrancesada mesa de té, blancas las alfombras de pelo largo...

Esparció arreglos florales preciosos. Eso si, recogidos de sus largos paseos románticos con su hombre. Me cuenta que con este cálido invierno ya se ven por los campos asturianos calas, hortensias, bouganvillas, narcisos y hasta aromáticas camelias...

Fijaros preciosas en como los detalles pueden ayudarnos a cambiar espacios. A veces no hacen falta grandes obras y sino que se lo pregunten a Marta. Una simple estantería puede abrirse ante nosotras como la más shabby chic jamás imaginada. Bastan unas letras con un bello nombre, una cajita con rosas y unas secas hortensias coronando en lo alto...
Me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaa y si encima le cuelgan guirnaldas delicadas entonces ya muero de amor total...

Pero no todo lo buscado por Marta es puro blanco. Majestuoso ese suelo de lamas de madera en contraste con todo lo demás y a juego con la enorme alfombre persa, ideal para dar calidez a los duros inviernos asturianos. Mirad hacia la derecha chicas...¿qué me decís de la vitrina en color miel junto al mullido sofá?...
Ummmmmmmmmmmmm, notas campestres deliciosas. ¿Sabéis una cosa?...sus dueños iban a tirarla pero ahí estaba nuestra mujer vergeliana para rescatarla, colocarle una guirnalda de secas hortensias y empapelar su trasera con un sutil papel...
Pero sigamos admirando más cositas con las que deleitarnos juntas...
Espejos diferentes, repisas que albergan angelitos y coronas, copetes antiguos y un enorme reloj muy vintage. Seguro que estará colocado por pura decoración, por allí las horas bien poco importan, pasan lentas y sabiendo detenerse allá donde se desee...
Y vamos a detenerla en pleno medio día, para admirar esa luz pura que recorre el salón de nuestra Marta. No hay nada como los blancos para saberla captar, que se refleje en las piezas de cristal perfectamente escogidas, en el brillo de ese hermoso suelo...
Y en esas verdes plantas que recorren la pequeña escalera frente al ventanal...Helechos...ficus y cactus navideños a punto de florecer...
Ummmmmmmmmmmmmm, como me gusta tu nuevo salón preciosa, parece todo recién comprado, escogido con tiempo y días, todo encajando a la perfección para hacernos ver a tanta vergliana de por aquí que no existen grandes obras, sino grandes amantes de la decoración que transforman desde el corazón...
Y la cosa podría haber acabado aquí chicas. Marta me enseñó muchas más fotos donde me decía que el resto de este hogar no estaba para ser enseñado. Yo las miré y me dije..."Si lo demás es precioso"...Y me dio carta blanca para compartirlo con vosotras. ¿Seguimos recorriendo tan entrañables estancias?...
Un largo pasillo...
 Y mucha madera...Puertas con solera, típicas de las construcciones asturianas...
 Un encantador dormitorio principal abuhardillado con muebles en color hueso. Marta quiere pintarlos en blanco más luminoso pero volverá a esperar tiempo hasta hablar con sus dueños. No dudo en que volverán a darle carta blanca para su total transformación...
 Deteneros en la estancia chicas porque nuevas pinceladas vergelianas aparecen por allí...ramilletes de flores en jarroncitos de cristal, textiles en crudo y una manta de pelo largo para abrigarse las frías noches invernales...
Y llegamos a la cocina...pequeña ella pero con matices muy coquetos...La mesa lista para merendar, repleta de dulces y tazas de té. Todo en verdes quizás emulando los campos que rodean la vivienda...
 Se que Marta ha empezado a colocar en ella algunas piezas muy de su estilo. Cajas de madera, botes de latón, bandejas de flores y algún que otro bonito paño colgado. Y colocará mucho más...Se que tiene en mente seguir transformando su nuevo hogar asturiano, poco a poco y sin prisas, escogiendo lo que le llegue al corazón para darle ese aspecto vergeliano que tanto ama, con la misma pasión que ha vestido de romanticismo ese salón tan vivido...
 Increíble mujer que no para...Hace días se fue hasta el mismísimo Gijón, allí le esperaba un mercado de muebles y artesanía. Se lo recorrió de extremos a extremo para toparse con una consola realmente divina. ¿Creéis que dudó en hacerse con ella?...De eso nada de nada, como que ya la tiene colocada en la entrada de la casa junto con dos piezas de vajilla de "La Cartuja" hace tiempo buscadas. Así es como se decoran hogares maravillosos, recorriendo tiendas y mercados, esperando quizás que las piezas escojan a mujeres que sepan colocarlas allá donde se merezcan...
Y hoy Marta ha querido salir a saludarnos a todas. Mi Marta Lladó, la mujer dulce, de enorme corazón, eterna sonrisa, palabras siempre dulces, luchadora incansable y gran mujer donde las haya. Como agradecerte el haberte conocido, que formes parte de nuestra ventana y el placer que supone para todas entrar en tus mundos tan sabiamente decorados...Como me gusta esta foto, esa cara feliz, la recompensa total a la búsqueda encontrada, la satisfacción de saber que a pesar de todo siempre hay una recompensa... 
Asturias...campos verdes...un hogar para soñar...piezas encontradas...cambios irreconocibles y una mujer encantadora...¿se puede pedir más?...Yo siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, cuando sea mayor quiero ser como Marta, perderme sin importarme los días ni las horas en un interminable paraíso...
¡Feliz miércoles vergeliano a todasssssssssssssssssssssssssssss!