Así estaba hoy mi reino...Sereno, ordenado, todo bien colocadito...
Los cojines perfectamente alineados y los plaids doblados y adornando sobre la cama...
Hasta me he decido a colocar una antigua jarra de porcelana con bonitas flores blancas de alegrías. Algún otro día os explicaré la historia de esta pieza de vajilla que hasta cuenta con palangana...
Flores...corazones colgando...portavelas...Ya sabéis todas de mi pasión por los detalles, por los arreglos florales y por el orden...
Hasta me he animado a esparcir saquitos de olor para que toda la estancia desprenda aromas de fresca lavanda
Después y como todas las mañanas, ventanales abiertos de par en par, hay que dejar entrar el aire veraniego de primeras horas del día. A través de ellos mi pequeño vergel asoma con su colorido y rebosante verde...
Tranquilidad total, calma y orden, es lo que respira mi reino. Y me encanta porque todo ello forma parte de mi día a día. Me da ese equilibrio que nos hace sentir a todos de maravilla...
Sin embargo hay momentos, en que aparecen mis dos bichitos. Y ellos no entienden de orden ni de equilibrios. Se enzarzan en sus juegos corre que te corre y acaban tumbados en mi cama...
Adiós ordén, relajación y todo lo demás...
Celia y Yaiza conviven hace años, son inseparables, amigas incondicionales, buscadoras de juegos y cómplices de montones de cosas. Dale un perro a un niño y le darás el regalo más preciado. Ellas se entienden a la perfección y en todo momento se buscan mutuamente para tumbarse en el sofá, salir a dar un largo paseo o simplemente, como tantas veces, juguetear en mi reino...No hay más que verlas, me encantan estas fotos. Es como si se imitaran la una a la otra, esas caras de pillas y de satisfacción por tenerse la una a la otra...
Y por arte de magia desaparecen los cojines alineados, los plaids bien colocados y ese orden de primeras horas...
Pero no me importa, es la salsa de mi hogar. Los gritos, las correrías, esa pelota que rueda y esos arrumacos de la una hacia la otra. Después cuando no las tengo, ahiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii como las echo de menos, es entonces cuando desearía verlo todo desordenado por el simple placer de verlas felices...
¿Sabéis qué preciosas?...Que momentos hay muchos, que los hogares necesitan de un equilibrio para funcionar, de un orden para sentirnos a gusto y de especiales rincones para admirar la belleza. Pero yo si tengo que elegir, prefiero cojines en el suelo, risas de fondo, mantas que se desdoblan y alegría a mi alrededor...
Después ya tendremos tiempo de ordenarlo todo y de admirar en silencio esas flores acabadas de colocar...
El lunes ha empezado y como cuestan los lunes...Pero sé que le daremos montones de usos maravillosos para hacerlo el mejor de todos los días. ¿Vamos a por él?...
Hola!! Que fotos mas maravillosas, me encantan! además están guapísimas! que monas...me recuerda muchísimo a mi Nalita, que genial! Es el mejor desorden, aunque yo a veces me desespero de tropezarme con tanto juguete por la casa, por todas partes...no hay un rincón que se libre, pero vamos que conociendome seguro que luego echaré de menos sus trastos cuando ya no los quieran porque habrán crecido...como bien dices, bendito caos provocado por energía tan maravillosa.
ResponderEliminarQue disfruteis muchísimo del verano, guapísimas!
Un abrazo enorme
Cris
Que fotos más preciosas, las que desordenan un poquitín tu reino que encanto, en las fotos como posan, hay que ver Yaiza que aire y lo que le deben de gustar las fotos, y de Celia que voy a decirte, una belleza y un estilo grande.
ResponderEliminarMe encanta tu reino con tus fotos y todo el detalle con que escribes siento casi como si estuviera ahi mismo :) tus hijas hermosas!!!!! con nuestros hijos disfrutamos ironicamente el desorden verdad? bonita semana!
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