El mini cuarto de la colada

Me vuelven loca los cuartos de la colada, donde guardar la lavadora, la secadora, la tabla de la plancha y montones de cestos repletos de productos para limpiar...Todo ordenadito y bien conjuntado... La lástima es el poco espacio con el que están dotados nuestras viviendas y la mayoría carecen de este preciado rincón. Pero aún así, yo me las ingenié para montar uno, aunque diminuto, tras la gran puerta de uno de los rincones de mi cocina. Y digo diminuto porque es pequeñísimo, pero suficiente para albergar lavadora, secadora, tabla de la plancha, repisa de madera con productos de limpieza, aspirador, escobas, banqueta de madera...vamos que está pensado al milímetro...En él he guardado el nuevo cesto de la colada y con algo de imaginación, la verdad es que no está del todo mal. Después colgando unos bonitos paños por aquí, unos cestos de mimbre en blanco, un divertido corazón de tela y una verde hiedra que no necesita mucha luz, el cuartito está mucho más que presentable...La verdad es que nadie se imagina cuando viene a casa, que tras esa puerta blanca, con precioso tirador, pueda esconderse un diminuto, pero necesario, espacio para guardar tantas cosas...¿No os parece?...

Y como de florecitas rosas va hoy el tema, con el nuevo cesto del cuarto de la colada, pues toca despedirse con más flores. Pero naturales...los geranios de mi balcón plantados hace días y que ahora empiezan ya a florecer...Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii que bonitos son y cuanta alegría aportan, lo que no sé es como pueden aguantar a pleno sol con los más de 33º que tenemos hoy en la ciudad...Duros que son ello...

¡Feliz día de martes para todas!