Jueves de petunias y geranios...

 Uf chicas, pensé que no podría pasearme esta mañana por los puestos florales de los jueves. Para mi es como un ritual desestresante acercarme hasta ellos, oler las flores, admirar los colores que ya por estas fechas son tantísimos que me vuelvo loca y comprobar la llegada de nuevas especies de temporada. Pero al final ni la lluvia ni el frío han podido conmigo y bien abrigada, paraguas en mano, hasta allí me he ido...Mientras llegaba en mi mente iba planeando darle colorido jardinero a un espacio un tanto apagado, entonces he visto las petunias, las primeras de este año, magníficas y colgantes...

 Y no he podido evitarlo...

 Conmigo se han venido dos en color rosa. Los maceteros ya los tenía, ideales para ellas que necesitan de su altura para que una vez crezcan caigan en cascada...

 Además como tienen pequeños agujeritos siempre tengo la posibilidad de pasarles unas finas cadenitas y colgarlos en lo alto que es donde las flores de petunia se admiran con mayor belleza...

 Pero además vergelianas me he concedido el capricho de comprarme un geranio, también el primero de esta primavera, en rosa como sus compañeras petunias. El envase escogido será este carrito de blanca madera que hace años compré y pinté...

 Reconozco que de los geranios me he ido enamorando poquito a poco. En un principio no me gustaban, los encontraba algo folclóricos y nada elegantes, pero ahora no falta algún que otro en mi vergel...

 He ido adorando con los años sus bellas flores discretas...

Sus verdes hojas rugosas y ese perfume que desprenden cuando me acerco, dulzón y agradable...

 ¿Creéis que me he precipitado comprando estas variedades tan y tan veraniegas chicas?...

 Pues no...mi preferido vendedor del puesto floral me ha dicho que ambas son durísimas, aún cayendo una tardía helada sobrevivirían sin problemas...

 Petunias y geranios están hechos para sobrevivir, pero yo aún así los colocaré en un rincón a resguardo y algo protegidos para hacerles sufrir lo menos posible...

 Faltaría más...

 Y aquí mi nombrado rincón sombrío. Ayer asomada a él me di cuenta de que había demasiado verde de la mano del gran helecho, las hiedras colgantes, las cintas y el aloe vera recogido hace dos veranos en tierras asturianas. Solo se aprecia algo de colorido gracias a las flores de ciclamén plantadas en la jardinera, pero éstas ya mismo se marchitarán con la llegada de los primeros días calurosos...
Veréis como todo cambia chicas...

 Colocando las dos petunias en maceta bajo el gran pino de ancho tronco...

 Nada mejor que verde y rosa, perfecta combinación que se que gusta mucho por aquí...

 Están preciosas, el agua fina les ha ido cayendo durante la mañana en el puesto de flores y ahora lucen espléndidas...

 Las acompaña del nuevo geranio colocado en el suelo creando diferentes alturas...

 Ahora si que si...rincón iluminado y vistoso...

 Desde el exterior...

 Y por supuesto desde el interior, desde mi habitación principal...

 Me encanta el resultado...

 La viveza que transmite el conjunto...

 Y las ganas de asomarse...

 Siempre os he comentado que mi dormitorio es más bien pequeñito, pero gracias a ese espacio exterior que lo prolonga la sensación para mi es infinita...

 Como un pequeño pedacito de verde anexo a mi espacio particular y que gracias a las plantas lo embellece muchísimo más...

 ¿Sabéis una cosa chicas?...Los fines de semana si me despierto mucho más tarde que Víctor, siempre le pido que me levante las persianas para poder amanecer con las vistas a este diminuto vergel tan coqueto...

Y es toda una gozada hacerse la remolona en la cama admirando helechos, cintas, petunias, geranios, hiedras, ciclamenes y hasta ese corazón de cristales que cuelga del retorcido pino...

Uiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, nuevamente empieza a llover con fuerza. Cierro las balconeras y me voy para el interior. Hoy ya se lo que tocará al llegar la tarde, lectura de la buena acurrucada en el sofá con mis peludos. De eso ya me he encargado yo trayéndome de la biblioteca de mi ciudad varias revistas de "El Mueble" y un irresistible libro de Francisco González Ledesma del cual me he aficionado hace poquito...

Ayer me sonreí muchísimo con vuestros comentarios de la entrada de las flores, como me gusta leeros sabiendo que María Bracaccini compra ramos de rosas a un señor que va de casa en casa vendiéndolas todos los sábados por diez dolares o que una encantadora mujer que ayer entró por primera vez desde el lejano Oxford en Inglaterra me cuenta que por allí son baratísimo los ramos florales, tan solo dos libras y se pueden encontrar en todos los supermercados, increíble, ¿será porque llueve mucho por aquellos lados?...Por cierto vamos a darle la bienvenida entre todas, "Extranjería Caldera" se hace llamar y es todo un placer tenerla por aquí, ojala comente todos los días...

Pues a ella y a todas mis mujeres...

 Feliz jueves de petunias, geranios, revistas decorativas y buenos libros para todassssssssssssssssssssss...