Me gusta el cambio porque a veces los cambios son necesarios. Renovarse, bonita palabra como deseo para un nuevo año...
Hoy dejaremos atrás un año para abrirnos a otro que creo será especial. No me gustan los años impares, pero este lleva mi cifra mágica, ese número quince que es mi preferido...
Así que desde aquí os deseo 2 millones de sonrisas todos los días...
0 millones de tristezas, para que las queremos...
1 millón de deliciosos planes que realizar...
Y 5 millones de alegrías que celebrar...
2015, bonita cifra...
Sigamos rodeándonos de todo aquello que nos enamora día tras día...
De la belleza de las cosas sencillas que poco a poco se irán abriendo a enormes deseos...
Dejemos entrar a la alegría, que nos inunde y sepamos contagiarla a quienes nos rodean...
Y abramos este nuevo año de la mejor de las maneras...
La noche de hoy será especial, larga, festiva, en ese lugar elegido, rodeados de los nuestros, repleta de risas, brindis, baile, manjares exquisitos, vestidas de gala y con esa enorme sonrisa en nuestras caras de enorme felicidad...
Enciendo mis velas de la blanca chimenea, os las quiero brindar a todas y cada una de vosotras. A mis seguidoras, a las de aquí pero también a las de lejanos países como Costa Rica, Miami, Chile, México, Argentina, Alemania, China...A personas especiales que nunca dejan de entrar y comentar, como mi adorable Marta Lladó y a otras muchas que aunque en silencio me leen casi todos los días...
Sin vosotras esta ventanita no tendría ninguno de los sentidos. Por ello ilumino hoy mi pequeño vergel en la ciudad totalmente vestido de gala, porque os lo merecéis y porque espero veros por aquí, por lo menos, otro nuevo año...
Con 2015 besotes...
¡Feliz Noche Vieja mujeres maravillosas!
Y hasta el año que vieneeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee...Que esta noche mágica y especial se convierta en la mejor de todas...